lunes, 17 de diciembre de 2018

Déjame no estar contigo.

¿Estoy lo suficientemente lejos?

Tu recuerdo entra al restaurante,
y yo debo atenderte.
Así no puedo.


Quédate donde estás. Por favor.
Déjame estar en otro lugar que no sea contigo, o cerca de ti.

jueves, 7 de junio de 2018

Nada muere, todo se transforma.

Dicen que debemos dejar el pasado donde pertenece... Pero, ¿A dónde perteneces tú, amor que ya no es amor?
¿Realmente puede perteneces el amor en el pasado si fue amor? 

Me confunde el tiempo... Mirar atrás y notar que hace menos de un mes estaba rendida a tus pies.
Me juraba y a ti-en mis conversaciones mentales- que te esperaría hasta que el invierno de mi alma se exteriorizada y muriese de hipotermia.
Pero sólo soy una mentirosa de mierda, ¿No es así?

Sin embargo, no te quisiera de vuelta en mi vida, porque no me agrada ser cautelosa; porque así no es esta niña, y lo sabes. Sabes que no me agrada callarme lo que pienso, sabes que me encantan los colores, y el sonido de la vida...  lo que toda la vida ofrece y significa. Aunque me quiebre, y de vez en cuando piense en la muerte. 
Que no me avergüenzan mis errores, y que a pesar de no ser religiosa, tengo fe en cada átomo existente en el universo.
Y contigo todo era tan diferente. Al principio, cariño, recuerdo envolverte en vida, y recuerdo tu sonrisa, y tus carcajadas, y recuerdo tus planes a futuro, y recuerdo que te llegó a gustar la vida y la forma en la que la niña percibía todo.
Pero en tan poco tiempo... 
De pronto, se acabaron los chistes, y los míos ya no te hacían gracia, de pronto no elegías escucharme, de pronto te importó demasiado mi pasado. De pronto me veías y no había una sonrisa espontánea en tu rostro. 

De pronto estabas del lado de la muerte, de lo gris, de pronto el amor ya no era lo tuyo. De pronto yo no era ningún motivo para seguir. 
De pronto ya no eras amor, y yo me fui alejando y no lo notaste sino hasta que fue demasiado tarde. 
Y recuerdo tus palabras: "No quiero nada de ti, no quiero nada contigo" 
Recuerdo tu mirada fija, y tus labios moviéndose... Mi alma no quiso escuchar pero mi cerebro absorbió tus palabras perfectamente "Tampoco es como si fuésemos a durar toda la vida" "En algún momento esto iba a terminar, nada es para siempre" 
Debí quedarme con esas palabras, pero mi alma envolvió a mi sentido común...
Y cuando me dejé caer, y volví a ti... Tú no me sostuviste como creí que lo harías. 
¿Cómo podías seguir callando tanto? ¿Soy tan nada que el silencio significa, para ti, más que yo? 

No puedo, amor... Lo quise dar todo y no me lo permitías, y así no pude, ni puedo. 
No quiero volver a ti. Me encanta lo que eres ahora, y lo que puedes llegar a ser, pero no quiero nada de ti de vuelta. 


...
...
...

Sin embargo, le tengo tanto miedo a tu abrazo... Porque a pesar de llamarte pasado, y a pesar de no quererte de vuelta... Tu abrazo de a poco me quita la cordura de reserva que llevo conmigo.
Y tengo miedo.
Porque tus abrazos siempre dieron calma a mi cuerpo, y es inevitable sentir -cuando me abrazas- cómo mis huesos, de pronto, le gritan a los tuyos que me retengan por más tiempo.

Le tengo miedo a tu sonrisa, porque me recuerda el inicio de todo.

Me confunde, a veces, el tiempo. 
Sin embargo, sé lo que no te puedo ofrecer, y es una tercera oportunidad, ni un amor genuino, porque lo que sentía se desgastó hasta quedar manchado de asfalto...
Pues recorrió -raído- demasiado camino y con demasiado peso.


Supongo que el amor sigue, pero sin ser amor.

domingo, 20 de mayo de 2018

Tu fantasma persigue cada paso que doy en el camino. Tendré que abrazarlo a él. O acabaré volviendo a ti. 

Marta Gallego

jueves, 17 de mayo de 2018

Pensarte ya me deja en piezas, y a esas piezas las deja lejos de sí mismas. 

Eso ocasionas.

Esto no lleva buen rumbo. 
Debo darme cuenta... Los recuerdos no son tangibles. 

martes, 15 de mayo de 2018

Esto no es un escrito.

El agobio de seguir viva me da los buenos días varias veces a la semana.
Mis puños no me alcanzan para saciar la impotencia de no poder simplemente elegir ya no estar.

Quiero un jodido botón de autodestrucción. ¿Sería tan difícil de conseguir?

No quiero prendas, no quiero nada que brille, no quiero maquillaje, no quiero nada que distraiga, no quiero colocarme una sonrisa, no quiero maquillaje.

El agobio de no tener el valor para quedarme en medio de la carretera me da las buenas tardes varias veces a la semana. Y el agobio de seguir viva me da las buenas noches cada vez que voy a dormir. 
Alguien que me conoce me dice que al verme te notas.


Y es que supongo que allí estás... en las puntas de mis pestañas a punto de caer; e
spero. O a punto de hacerme llorar.

viernes, 11 de mayo de 2018

Además de su gorra, ¿Qué me quedó?

Me quedaron sus muecas... 
No puedo quejarme sin apretar los labios de la manera en la que... saben... él. 

Su esencia...
En la calle, a veces me da su perfume. Entonces camino más rápido de lo usual, aunque luego mire atrás y no lo vea por ningún lugar, pues algo que aterre más que pensar que es él, es pensar que sólo es su recuerdo.
Pues, a veces, estoy acostada en mi habitación, y percibo su olor en mi almohada. ¿Se dan cuenta el poder de mi memoria?
 Díganme, ahora, ¿Qué demonios me queda, más que rendirme ante su recuerdo? Porque, demonios, he cambiado la funda más de 5 veces... y aún así.

Su silueta, su tacto...
A veces veo su sombra caminando a mi lado, y siento un cosquilleo en mis manos. Pero no es él, nunca es él. Es su recuerdo. 
Su recuerdo conmigo permanece, aunque cada vez más ligero, aunque aveces demasiado tangible. Todo depende siempre de la intensidad en la que le piense, o en la que le extrañe. 

martes, 8 de mayo de 2018

Tu recuerdo conmigo

Estoy en el semáforo esperando pasar
Mientras, imagino tu imagen -o al menos tu sombra- al lado de mí. 
Empiezo a imaginar que me tomas de la mano y sonrío. Allí cierro mis ojos, y te escucho... me quedo inmóvil por supuesto, siento una corriente que recorre la silueta de mi cuerpo... Y al abrir los ojos, noto que tengo una imaginación bastante vivaz, y que el semáforo peatonal ya está en verde.
Casi te confundo con un recuerdo de ti...

martes, 1 de mayo de 2018

A veces, el sentimiento no es suficiente.

No te extraño.

Creo que extraño lo que creí que podríamos llegar a ser si de verdad hubiese funcionado, si me hubieses querido como quería que me quisieras, si hubiésemos coincidido como quería que coincidiéramos.

Pero no fue así…

El sentimiento a veces no lo es todo, al menos no cuando se siente a desnivel.
Dices “te quiero” y escuchas un “te quiero” a cambio… mismas palabras y misma pronunciación, sin embargo, los pensamientos no están a la par.

Para ella querer va más allá de estar tomados de la mano y compartir silencios largos recostada en su pecho. 

Para él querer va más allá de tomarse fotos y subirlas a las redes sociales haciendo competencia contra conocidos por quién sonríe mejor.

Para ella querer es salir a compartir momentos juntos con amigos y familia y sonreír y hacer cosas diferentes cada día y expresar lo que sientes con palabras acompañadas de hechos.

Para él querer es verse, y... no lo sé. No sé qué es para él querer, pues no hacía sino quedarse siempre en silencio. Que al inicio, chicos, eso me encantaba. Pero poco a poco… ese silencio me fue dando algo de miedo. Pues me agrada hablar, y me agrada escuchar.
No me agrada mucho el silencio, de hecho siempre lo he odiado; sin embargo, el silencio con él era tan diferente… tan precioso. Pero poco a poco fue tomando un sonido bastante incómodo, el de mis pensamientos queriendo salir, el de mis dudas queriendo escucharlo expresarse, o decir alguna cosa que me hiciera saber que no estoy con un jodido fantasma.

Querer es desfragmentar tu día en pedacitos diminutos para contárselo a esa personita, porque esa personita siempre va a querer escucharte y saber de ti. 
Querer no es decir “yo no importo” cuando se pide una opinión.

A ella le daba miedo encerrarse en una sola persona, pero lo hizo. Y para él eso no fue suficiente.
Ella sintió que no fue suficiente. Que ella nunca fue suficiente para él.

Y no piensen mal. No me refiero a que él pensara que ella no mereciera el esfuerzo. Sino a que… él no sentía lo suficiente para hacer el esfuerzo, y por ende, no hizo nada de lo que él sabía que a ella le gustaría.

A veces, como dije, el sentimiento no lo es todo. A veces, el sentimiento no es suficiente.

Todo muere por expectativa y realidad. La idealización de un personaje que debe realizar cierto rol “perfecto”, y todo es fallido.

domingo, 29 de abril de 2018

Si no fueses tan testarudo... Si no te diera miedo querer...

Sentimentalmente siempre estuvimos a destiempo.

sábado, 28 de abril de 2018

La niña le pidió con un beso que, por favor, no la dejara caer
 ...
 ... 
Y ahí está, limpiándose el polvo, mirando al suelo, preguntándose: 
"¿Cómo es que creí que era posible? Si no pudo siquiera la silueta del pasado..."
De pronto siento la necesidad de contarle mi día, como si lo hubiese hecho toda mi vida...
Cuando realmente es el deseo de hacerlo costumbre lo que me da ansiedad. 

Quisiera que quisieras lo mismo.
Me parece demasiado triste no poder coincidir como quiero coincidir contigo.

El amor, esperando, salió por la ventana.

jueves, 26 de abril de 2018

La niña se siente en un destiempo constante cuando está con él, y no sabe.. no sabe distinguir las realidades superpuestas, y no sabe si eso es bueno o no, y no sabe si él es bueno o no.

Es increíble cómo ha tomado raíces la cobardía en esa alma de papel.

martes, 24 de abril de 2018


A veces la culpa no tiene dueño; a veces simplemente las cosas pasan, los sentimientos se van por debajo de la puerta, y nadie está observando. 

De pronto es la falta de cuidado de parte de ambas partes.

viernes, 20 de abril de 2018

Segundo round.

¿Hasta cuándo dejaré de actuar como una jodida niña?
Me vuelvo nada cuando me abraza. 

A veces el sentimiento no es suficiente cuando falta madurez.
Invadida... esa sería la palabra para describir cómo me siento. 
Rota e invadida.


Y pensar que yo quería vivir en sus brazos mil años...

¿Cómo es que te atreves a seguir dando eso que siempre he odiado?
Ese silencio...

Niña. Será mejor que no empieces a llorar. Por favor... no empieces.
No está en tus sueños, pero regresó a tu realidad, ¿asimilas eso?
Límpiate la herida, ya deberías estar bien. Pronto estarás bien.

No pienses, no pienses, no pienses... 
No te des por vencida. 
Hace nada estabas convencida que habías hecho lo correcto en darlo todo. 
Que le querías a pesar de todo.

No te dejes convencer de los malos recuerdos.
No te dejes, no te dejes, no te dejes...


miércoles, 28 de marzo de 2018

Menos mal no te confesaste, niña, porque sino, hubieses dormido con carcajadas en tu cabeza. Carcajadas no tuyas..

I'm not worth it.

Creí haberme enamorado, esta vez, de la persona correcta.

Pero la verdad es que no hay tal cosa, no para mí.

Deal with it.

Vamos, cariño, no es tan malo como parece. ¿O sí?
es lo que es, y tú nunca fuiste, y nunca serás.

Deja de intentarlo, cariño, ni que quedes en deuda contigo misma serás suficiente.

No vales nada.

Por ti no se pierde ni el sueño.

Así que sigue adelante, deja de mentirte. No tendrás ni un desenlace, ni un final feliz. Nadie te amará como lo deseas. Nadie interpretará ese papel que tienes en tu cabeza echa mierda.
Muévete, hazte a un lado, no sirves para nada, ni para nadie.

You win.

Creí que todo iría bien... Siempre caigo en el mismo cuento de hadas.
Que todo está bien sólo porque sus ojos me sonríen, que soy la indicada porque sólo conmigo ha sido de tal o cual manera.
Pero no es así, soy esa parte del juego que colocan para entrenamiento.

Like, "Vamos, hombre, si logras pasar éste tramo realmente estás listo"

soy ese modo de prueba.

y me pasó. O eso creo, porque le di todo, sin él pedirlo.
y quedé en nada.

So, you win.
now, fuck off.

domingo, 4 de marzo de 2018

I'm so fucked up.

Me pregunto una y otra y otra vez qué demonios me está ocurriendo, y no obtengo respuestas, sólo lágrimas tras lágrimas. Estoy completamente perdida. 
Y estoy perdidamente enamorada. 

Siento que el peso del aire puede conmigo; siento el oxígeno demasiado denso. 

"This is Love?" I wonder. But I don't get an answer.
Instead, every time I get more and more and more anxiety. So I smoke waiting for a call, or any relief ... But I just, I keep feeling the same shitty way since I wake up.

Llevo varias noches pensando en nuestro posible encuentro y tengo tanto miedo... 
¿Cuándo dejaste de tener miedo por nosotros? 
No paro de pensar en el posible final, porque aunque no lo quiera (Que no lo quiero, juro por mi vida misma que no te quiero perder) he considerado alejarme. Porque te siento tan lejos de mí, que mi dolor no hace más que alimentarse de la ansiedad que crea tu ausencia. 
¿Y cómo le haces para dormir? 
Demonios, me siento tan patética cuando espero hasta eso de las 3am por unas jodidas buenas noches. O cuando no me paro de mi cama porque en algún puto momento obtendré un "Buenos días" de tu parte. ¿De verdad estoy tan mal por esperar todo el día por un mensaje de tu parte diciendo que me extrañas... Y que no soportas estar así conmigo? 
Me fumé mi deseo, no se hizo realidad. No estás conmigo.

Estoy jodida, estoy realmente jodida. Y a este punto sólo quiero dormir por días. Porque no quiero sentir absolutamente nada, porque quiero dejar de llorar, quiero dejar de pensar en ti, quiero dejar de esperar. Quiero que todo esto tenga un final. Porque así no puedo. 

Ni siquiera sé por qué en algún punto creí que te importaba un poco. 

Tú sólo deseas morir. 

Y yo, idiota, queriendo vivir por ti. 

sábado, 3 de marzo de 2018

I need to be burned.

El miedo no me está consumiendo, me está quemando... Se aloja en mis intestinos como los parásitos, y se esparce. Siento el fuego como si tuviese fuego realmente en mi estómago. Y no puedo más.
La tristeza recorre mis pulmones, y aunque le pido que salga para respirar mejor, ella no se aleja, no se va. Tengo una agonía que mantiene mis poros abiertos todo el tiempo, pues mi cuerpo cree que así se irá, pero no, ni por mis poros, ni por mis párpados.
Llevo días con los párpados hinchados y no es suficiente, ni la tristeza, ni la agonía, ni el miedo se acaba, o se aleja. Me siento totalmente deshidratada, y me sigo sintiendo igual de saturada.

lunes, 19 de febrero de 2018

Repira, cariño... 1, 2, 3.

Me duelen los párpados. En éste punto, debo decir que tengo tanto miedo que estoy tranquila.
Es decir, no puedo actuar como si estuviese fuera de mí -aunque lo esté- porque el mundo sigue, ¿saben? y nadie se detendrá a preguntarme qué demonios sucede conmigo.
Excepto mi madre, claro está. Que ayer la sentí con temor también, me miró con furia y miedo por verme tan devastada...
Pero, lo que ella no se imagina es que estoy tan consternada, furiosa, y preocupada como ella.
Seriamente he intentado llevar la fiesta en paz; saben, la fiesta de mi miseria. Pero no es posible, al menos no me ha sido posible estos días, aunque sinceramente a veces pienso que simplemente pasa que me distraigo y por eso no caigo, pero que debo caer.
Siento que mi caída la han colocado en cámara lenta, como a la espera que al final no sea una caída, pero, demonios, estoy cayendo de todas maneras, y no tengo la menor idea de cómo salvarme.

Que linda la niña, ella piensa que tiene salvación.

Como les dije al inicio, a éste punto tengo tanto miedo, que estoy tranquila. O eso parece. Intento estar lo más ocupada que puedo, como si estuviese corriendo.
¿No les ha pasado? Que de pronto empiezan a correr, y siguen, y siguen, y siguen, y siguen, y saben perfectamente que cuando se detengan van a quedar exhaustos y que posiblemente les faltará el aire, y por supuesto, se les hará increíblemente difícil seguir corriendo, incluso seguir caminando; saben que se tirarán en el suelo a tomar un respiro inmenso, porque como ya dije: quedarán exhaustos... Así que bien, justo por saber eso, simplemente siguen corriendo, y siguen, y siguen, hasta que llega un momento donde finalmente se detienen, y sucede exactamente lo que pensaron, se detienen y de inmediato empiezan a jadear, y no pueden más y se tiran al suelo. 
Bien, a lo que quería llegar con todo esto es que así estoy últimamente. Distrayéndome, ocupándome lo más que puedo, porque sé que si dejo un mínimo espacio en blanco, me quebraré y no querré levantarme otra vez, no querré ocuparme de nada, sólo querré estar tirada en la cama sin nada que hacer. Al menos hasta después de llorar y gritar, y pensar, y gritar otra vez, e imaginarme las maneras de hacerme daño, y cómo y cuánto dolería todo aquello; para luego volver en sí, y quizás, sólo quizás levantarme de cama.

Estos días me he mirado al espejo y sólo observo alguien muerto, de manera muy literal, me veo enferma, y eso me enferma. No sé si me explico.

Luego, bueno, mi espejo se quebró, y adivinen qué, ahora me siento enferma. Tengo miedo de verme en el espejo porque me duelen los párpados, y ni mi voz es la misma. Si me siento así, ¿Pueden imaginar cómo luzco?

Y salgo, y las personas no paran de mirarme; y yo simplemente les temo, temo de sus pensamientos y ya me quiebro en cualquier lugar. ¡Por el universo mismo!

Me siento enferma, y eso me aterra, pero justo por eso... Debo estar calmada.

sábado, 10 de febrero de 2018

necesito una herida

Hay una niña en un bote queriendo saltar al mar. No soporta la agresividad de las olas, ni el movimiento constante de su cuerpo por la inestabilidad de la barca.

Me hace falta el oxígeno, y una que otra herida. 
herida
herida
herida
herida

¿Por qué tuve que sentirme tan bien? Es decir, fue una invasión a mi persona, una invasión a mi tristeza y nostalgia eterna. 

¿¡Por qué?! 

Llevo demasiadas promesas rotas como para volver a lo mismo, pero, ¡carajo! 
Nadie entiende que, a veces, es necesario el dolor. Es necesario que el cuerpo grite aún más que el alma...

No tengo cigarrillos, y llevo demasiadas cosas sin decir...

Si sigo intacta es por una maldita promesa de mierda. Si sigo acá no es por mí...
Nunca es por mí.

Hace un par de noches. Y aún tonight.

Nada ha cambiado, cariño.
Sábado, domingo, lunes, da igual... ¿Que qué se siente?
Pues tan común como un resfriado.

Ésta sensación de querer huir, o querer suicidarme es demasiado usual en mí, así que no es ninguna sorpresa. A veces tengo miedo, pero con quedarme en mi habitación es más que suficiente para estar a salvo.
Ahora, cuando estoy en la calle... Allí sí me pongo nerviosa, y empiezo a sudar frío. Pues siento a la muerte tan cerca de mí.
Veo a la muerte en cada automóvil que pasa, en cada puente, en cada edificio, en cada oficial de policía.
Y al llegar a casa, entonces debo pasar por la cocina, y es inevitable acercarme y tomar un cuchillo, y pasar el filo por mis muñecas, y acariciarme el rostro y la garganta con el mismo.
...
...
Pero bien, ahora mismo estoy en mi habitación, supongo que puedo estar tranquila. Y en un momento saldré, pero no, no tomaré ningún cuchillo, porque hay personas en casa, así que bien, con sólo un par de cigarrillos creo estaré bien.